Malditos moscos... cómo los odio... En serio, al parecer hay una operación muy bien planeada por parte de los asquerosos nematóceros Cuernavacenses para atacarme... se agrupan en el cuarto de tele y de ahí planean sus ataques... primero el ataque psicológico, es decir, pasar al lado de las orejas para que sientas su presencia, luego ya atacan con todo y pican en los lugares más molestos, como las plantas de los pies... malditos, malditos sean... ¿Qué pasaría si no existieran los moscos? No se quebrantaría el ciclo de la vida porque las ranas podrían encontrar un nuevo aperitivo, no? Los humanos seríamos felices...
domingo, 13 de julio de 2008
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